Parques infantiles: una opción de viaje
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El viajero no pocas veces no viaja solo, sino que tiene que llevar, le gusta llevar o curiosamente lleva a otro tipo de pasajeros con él. En este caso es posible que las condiciones del viaje varíen, que hayan de adaptarse a los gustos de más personas y que el consenso se fragüe sobre itinerarios, destinos, hoteles o medios de transporte.
Uno de estos casos se presenta cuando el viajero ha de ir acompañado de niños. En estos casos, puede que los gustos de los más pequeños sean la prioridad y no pocas veces, dentro de estas prioridades, se encuentran los parques infantiles.
Por ello, desde Pop Online Shop vamos a centrarnos en esta ocasión en un tipo de objetivo de viaje donde los más pequeños tienen su epicentro de cara a lograr los mejores resultados de una época del año en la que lo más importante es pasarlo bien para los más pequeños: el verano.
La oferta en parques infantiles
Existen numerosos tipos de parques infantiles. Desde los conocidos Disney World hasta el tradicional parque infantil con bolas de goma, las opciones para que los niños se entretengan son múltiples y variadas.
Y es que de la magia de Disneylandia y las montañas rusas a las instalaciones que podemos encontrar en un Mc Donald’s o similares existen notables diferencias, empezando por los menús y acabando por los regalos que son originales, como regalar una casa de madera del tipo de las que se ven en https://casasdemaderashop.es.
En primer lugar, si queremos visitar un parque de Disneylandia y vivimos en Europa, la localización geográfica más próxima está en París. Bien es cierto que el parque por antonomasia es el de Orlando, Florida, Estados Unidos, pero para ver a Pluto o el Pato Donald bien podemos acercarnos a la capital de Francia.
Las ventajas de algo más cercano
Otro tipo de instalaciones son los parques naturales, Safari parks o similares. En España hay unos cuantos Safari Parks que seguramente entretengan a los niños viendo animales que pueden ir desde un León hasta un oso en régimen de semilibertad.
La gran ventaja es que es una pequeña aventura que está más cerca de lo que puede ser un viaje internacional, que nos encontramos en la naturaleza y que, bien o mal, hace las veces de caminar por la sabana africana.
Las posibilidades son varias, y si no, siempre nos queda la opción de pasar un fin de semana en parques infantiles.
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